De Bangalore a Hampi

Pasa ya una semana desde que mi cuerpo pasea por este pais que me tiene enamorado, y digo cuerpo porque mi mente hace meses que ya estaba sumergida en el.


Aterrizamos en Bangalore a eso de las 2 de la madrugada tras 9 largas horas de avion, una sacudida de calor y humedad nos daba la bienvenida y todos los nervios previaje se disiparon en ese momento. Una sonrisa de satisfacion se colgaba de mi cara, satisfecho de haber cumplido la promesa de regresar la ultima vez que visite este magico pais.


Deberiamos tener taxi esperandonos para trasladarnos al hotel, pero cosas del destino, ninguno de los cartelitos que pasaban por mi cara al salir del aeropuerto tenian mi nombre.... je,je, comenzaba la aventura... Tras acordar precio nos subimos a un coche con cristales tintados y con esa sensacion primermundista de que te la van a liar, todo lo contrario, amablemente nos dejo en la puerta del hotel Empire. habitacion doble deluxe (1200 rupias) no queremos imaginar como seria la standar, no es que fuera mala pero tras ver las fotos de la web nos imaginabamos algo mejor, no obstante la plantilla del hotel era simpatica y nos ayudaban con todo lo que requeriamos, es una opcion barata de bangalore y en pleno centro, si lo que se busca es tranquilidad no la encontrareis aqui por que el trafico por las manianas es un despertador que no se puede apagar... dulces suenios y por la maniana primer paseo por la ciudad en moto ricksaw gratis por que visitamos un par de tiendas para que cobrara la comision, un tipo majo que nos dejo en un parque para relajarnos del ruidoso trafico en forma de kaos organizado.





En bangalore no hay mucho que ver pero si se pueden hacer compritas y esas cosas, nosotros nos dedicamos a pasear para aclimatarnos al calor de este otro mundo. Comilonas en preciosos restaurantes, muy recomendables ( Taika, Ebony y Casa del sol) Para desayunar Koshis Cafe es un lugar increible donde ellos disfrutan de sus comidas y se puede disfrutar de ser el unico blanquito del lugar...por supuesto todo a precios que ni te lo crees...





El tercer dia ya no podiamos con la contaminacion y el ruido , asi que arreglamos un billete de tren de emergencia pagando un poco mas pero obteniendo plaza en el sleeper class para Hospet. Y tras tenerlo todo cerrado nos pasamos el dia entero en el jardin botanico. Era el dia de la republica, asi que el bullicio de gente era increible. A cada paso nos paraban para hacerse fotos con nosotros y preguntarnos mil veces el nombre y pais de procedencia, es como ser famoso o algo asi.... tres ninas se agarraron de nuestras manos y nos pasamos todo el dia con ellas, muy divertido y refrescante y ver sus sonrisas al verse en la pantallita de la camara de fotos te llena de alegria.... tras un dia de relax en la naturaleza nos encaminamos al hotel a coger nuestras cosas y tras discutir precio con el Ricksaw nos dejo en la estacion de tren para coger nuestro sleeper class...no estuvo tan mal, el tren llego a su hora y compartimos cabina y noche con dos australianas y tres jovenes indios y un senior que no dejaba de roncar y tirarse pedos, hasta tal punto que en mitad de la noche me levante para darle un golpecito y despertarle.





Llegamos a Hospet sanos salvos y algo cansados pero contentos, esto ya era mas tranquilo y solo nos quedaba un pequenio paseo en Ricksaw para llegar a Hampi..... Primer destino.